Hoy aquí, mañana allí

viernes, 29 de enero de 2010

 



Esta semana me ha tocado venirme a Vilafranca a trabajar, así que aqui ando desde el lunes. No me apetecía nada absolutamente pasarme una semana fuera de casa, pero es lo que toca, así que qué remedio.

El fin de semana ha sido muy entretenido, y lo cierto es que llevo desde principios de año que no he parado prácticamente ni siquiera los fines de semana, y con lo de ésta semana, va a ser otra mas que practicamente no paro un rato por casa.

La tarea aquí en Vilafranca es hacer pruebas de ERTMS, y aunque son entretenidas, me resulta un rollo tener que ir en la cabina con tres o cuatro personas desconocidas. Y yo, cuando estoy con un desconocido, bueno, pero ya con varios me suelo mostrar bastante serio, seco y borde, no porque yo quiera, sino porque es lo que me sale, por no hablar ya cuando se ponen a preguntar por cosas un poquito personales, como si tienes novia, si la camarera del hotel está buena, o si fulano tiene una hija soltera que es un partidazo...

Mañana (para mí, que aún no me he acostado) viernes saldré un rato por Barcelona a conocer la nueva línea 9 de Metro, que es automática, y tengo curiosidad por ver qué tal va. Me llevarán mis queridos amigos Luis y Hugo que tendrán que soportar mis consultas sobre el catalán, ja que per mes que ho intento no acabo d'aprendre bé moltes coses.

Des de Catalunya poc mes que comptar. Un petó a tots i a totes!
(Desde Catauña poco mas que contar. Un beso a todos y todas!)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Y no cansa un poco salir cada dos por tres por ahí? Con el tema de los desconocidos me pasa lo mismo, puedo parecer un borde y antipático, pero es que no me sale otra cosas, y como a ti, cuando se ponen ha hablar de tías y todo eso, me pongo de una mala leche increíble, como si no supieran hablar de otras cosas.

Un beso cielo

Anónimo dijo...

Ah, que duro es el mundo ferroviario, hetero y machista, para un gay...