Five, four, three, two, one...

Bueno, el tiempo ha pasado y, por fin, he empezado a trabajar. Que ha costado lo suyo. El 26 de Noviembre fue el dia en que me puse a los mandos de mi último tren en mi anterior empresa. Y aquí fue el 29 de Abril cuando por fin empecé a trabajar. Os podéis figurar que ha sido un proceso largo (interminable), pesado (agotador), pero lo importante es que, de una vez por todas, empezó mi nueva vida.

En estas primeras semanas he de decir que la diferencia es abismal: las jornadas son muchísimo mas cortas, mejor organizadas, y sobretodo muy descansado. Lo cual está muy bien. Pero, por ahora, de nada me vale estar descansado cuando estoy a setecientos kilómetros de mi casa. Aunque es cierto que es el principio y todavía me estoy amoldando, será cuestión de tiempo que me pueda organizar bien y disfrutar ese anhelado descanso en mi hogar-dulce-hogar.



Por otra parte, el estar tan lejos de casa (y volver tan poco) me hace tener la sensación de tener totalmente olvidados a mis amigos, mejores y peores, pero que quiero igual. Porque mis escapadas a Madrid son tan cortas que no da tiempo a nada, antes de bajarme del Ave estoy ya pensando en que, en dia y medio o dos días, tendré que estar otra vez subiendo para acá. Y como por ahora no puedo dividirme, intento organizarme lo mejor posible para, cada vez que bajo, quedar con alguno de ellos, lo que pasa es que entre viaje y viaje pasan varias semanas de por medio, así que hay gente que llevo sin ver desde Navidad... o antes! Mil disculpas, en serio. No os figuráis con qué paciencia tengo que tomarme todo ésto.

Y si hablo de mi parque móvil, que voy a decir. Pasan los días, las semanas, los meses, caducan revisiones, las reparaciones pendientes se acumulan... y yo sin poder hacer nada. Estamos en plena época de concentraciones y eventos automovilísticos, y creo que me voy a perder la mayoría. El pobre Volkswagen, que me lo traje para poder quitarme, un poquito, el mono de coche viejo, y porque además aquí hay mucha actividad en cuanto al mundo de los Volkswagen, está esperando recibir ruedas nuevas ya que el otro día volviendo de una concentración me reventó una en plena autovía. Y no se si para el 2 de Junio, que hay una importante concentración en Francia, lo podré tener listo. El 124 debe pasar por revisión de carburador antes del viaje a Santander (a finales de Junio, y espero que con visita a Barakaldo), la Siata le caduca la ITV ahora, el Land Rover la tiene pendiente desde el año pasado, el 127 amarillo a falta de ajustes, igual que el rojo... EN FIN!!!

El caso es eso, que siento que estoy en una etapa de transición, espero que todo se vaya normalizando con el paso de las semanas, y yo pueda ir completando tareas pendientes, asentarme, organizarme, etc... Sólo me queda por hablar del noviete que me he echado (aunque algo conté en el anterior post) y del que os contaré mas el próximo día (que no se cuando será, visto que no consigo centrarme y escribir frecuentemente) pero si os diré ya que es un sol.